Cuando hablamos de rituales, nos referimos a una palabra que tiene asociada diferentes significados.
-En un sentido más amplio, llamamos ritual a una rutina. Por ejemplo, imagina que un hombre, antes de irse a trabajar, le gusta ir a hacer un poco de running durante 10 minutos. De esta manera, libera endorfinas (la hormona de la felicidad) y le cuesta menos enfrentarse al día a día. Esto lo consideramos cómo un ritual, como una rutina que sigue todos los días.
-Si nos referimos al ámbito esotérico, entonces podemos definir un ritual como un conjunto de prácticas o ritos que nos ayudan a conseguir ciertas acciones. Por ejemplo, existen rituales que pueden ayudarnos a recuperar a la persona amada, a obtener el trabajo de nuestros sueños, a poder curar algunos leves problemas de salud…
Si profundizamos un poco más en los “rituales” esotéricos, descubriremos que suponen una especie de conexión mística entre lo desconocido, entre lo que verdaderamente nos importan.
Sin embargo, para hacer rituales es importante que sepamos que existen una serie de normas a cumplir.
Por ejemplo, que hay que ser muy cuidadosos con los pasos que hay que seguir.
En el momento en el que empezamos a hacer un ritual, debes de saber que vas a trabajar con la energía más poderosa del mundo, con la magia. La magia, de por si, se asocia con el color blanco, la más pura que podemos llegar a encontrar.
Sin embargo, si no hacemos las cosas bien, si añadimos una cantidad de ingrediente que no es la adecuada, si adulteramos el orden, es posible que la brujería blanca se convierta en magia negra. El problema de la magia negra es que, aunque en un primer momento pueda parecer la mejor opción porque los hechizos van más rápidos, lo cierto es que tiene un precio que puede ser muy alto.
(Por ejemplo, puede ayudarnos a conseguir al amor de nuestra vida, pero, en el momento en el que más felices estemos con él, el destino nos lo puede arrebatar de la peor manera posible).
Por lo general, hay que seguir las siguientes pautas para hacer rituales:
Sigue estos pasos y, sobre todo, ten mucho cuidado con lo que haces.