La Consulta Angélica es un sistema de adivinación que apela a las energías místicas conocidas como ángeles guardianes, pues estos seres unidimensionales están considerados como puros y muy cercanos a la perfección, por lo que también son considerados ángeles de luz capaces de guiar nuestro destino e iluminar la toma de decisiones.

La asignación de ángeles guardianes según los expertos en la materia nos viene determinada por el nacimiento e independientemente de que la persona sea consciente o crea en ellos, se le ha encomendado su protección intercediendo a su favor en la medida que resulte necesario, aunque algunas personas pueden no ser nunca conscientes de ello.

Al igual que existen varios elementos que componen la tierra, también se diferencian distintos tipos de ángeles guardianes que se relacionan con ellos en las siguientes categorías:

Ángeles de Fuego Se representan habitualmente con el color rojo que simboliza el fuego y representa la fuerza interior, la energía creadora, pero también las emociones negativas o energías destructivas que son abarcadas por el fuego de la ira, el odio y el rencor, unas emociones que nos inflaman por dentro y nos impiden ver el verdadero camino para tomar buenas decisiones.

Ángeles de Tierra Estos ángeles guardianes representan lo bello, la naturaleza, la fecundidad y en definitiva el principio de la vida y también se les asigna la capacidad de atraer la abundancia. El color que representa a este tipo es el verde.

Ángeles de Agua Los ángeles de agua se representan con el color azul y se caracterizan por atraer la paz y llevar la armonía a las relaciones personales y en este punto, merece la pena reseñar como muchos rituales litúrgicos incluyen el agua en sus representaciones como por ejemplo los bautizos donde se moja la cabeza de los niños con agua bendita.

Los ángeles de Aire representan el pensamiento, la inspiración y la creatividad, también anuncian cambios y giros en la situación, pero en términos generales anuncia buenas noticias y fluidez en las comunicaciones.

Quienes sean aficionados a los temas esotéricos ya se habrán dado cuenta de que la clasificación de los ángeles está directamente relacionada con la de los signos del zodiaco y se le atribuyen las mismas cualidades a los mismos elementos, por lo que quienes no practiquen ninguna religión pueden utilizar la consulta angélica sustituyendo los ángeles por planetas zodiacales que pertenezcan a los mismos elementos.

Como utilizar la consulta angélica

Para realizar esta consulta se precisa disponer de una baraja especial con las impresiones de los ángeles guardianes y cada una de ellas llevará implícito un significado y el elemento al que se atribuye.

La forma de proceder es barajar todas las cartas y seleccionar cinco cartas al azar, cada una de ellas representará a cada uno de los elementos en que se clasifican los ángeles mencionadas anteriormente y se extraerá su significado en función de la ilustración elegida.

La quinta y última carta es la carta del arcángel y equivale a la respuesta final o solución del conflicto o duda que se plantea.

La forma de colocar las cartas puede ser en sentido horizontal, una al lado de la otra, aunque la naturaleza de la tirada sugiere colocarlas en forma ascendente o de escalera para favorecer el camino de la iluminación que conduce al cielo.

La consulta angélica a diferencia de otros métodos de adivinación no nos habla de resultados si no de actitudes que debemos abordar para conseguirlos, analiza nuestros comportamientos o la forma en la que nos enfrentamos a los problemas y nos invita a deshacernos de todo lo que nos estanca y nos resulta negativo.

Esta tirada también puede ayudar al consultante a evitar peligros o situaciones conflictivas apelando al criterio de los ángeles guardianes para que iluminen el camino a seguir, pues en la tirada también aparecerán los aspectos o actitudes negativas a evadir para evitar las situaciones adversas y revertir el resultado a nuestro favor.

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